Un Ivo en Málaga empezó en febrero de 2023, cuando la co-star de este blog firmó un papel con la empresa de buscar cosas en Internet y nos largamos de Madrid sin pensarlo demasiado para vivir al lado del mar. Era un sueño hecho realidad.
Mantener este blog me obligaría a reflexionar sobre las experiencias positivas y negativas que fuese acumulando y me ayudaría a conectar con malaguitzaharrak y malaguitaberriak1.
Un fantástico ejercicio de salud mental y networking.
Estaba muy ilusionado por compartir con ella la experiencia de vivir en la ciudad que pretende ser el Silicon Valley europeo2, pero cuando rompimos la relación el pasado octubre, me vi una vez más frente a la cara B de esa pretensión: la gentrificación.
Si me quedaba en Málaga, tendría que mudarme a un piso carísimo en un barrio dejado de la mano de Dios3. ¿Y pa’ qué? Con solo un puñado de amistades en estado embrionario, estaría relativamente solo; al lado del mar, pero solo.
Trabajando en casa desde 2018, ¿qué puñetas pintaba (un) Ivo en Málaga?
De dónde venimos / adónde vamos
La gente se sorprende cuando cuento que a pesar de haber nacido en Lanzarote, no conozco nada de allí; he pasado casi los mismos años en Madrid que en Murcia, y a estas alturas me siento poco menos que un apátrida.
En Madrid era el murciano y en Murcia el madrileño.
Y en Málaga, el novio de Olga.
Al irme de Málaga, la gente me preguntaba si me volvería a Madrid, y cuando me hice yo esa misma pregunta, me encontré con una respuesta parecida a la de arriba: ¿qué se me ha perdido a mi en el agujero negro4 de España, en el que acaba todo el que no sabe adónde ir?
“A ver si encuentro algo de lo mío”
950€ por un agujero en Puerta del Ángel para respirar veneno mientras ves si “lo consigues” y 10 años después ya no te puedes ir porque tienes la vida montada.
Casi vuelvo a caer en la trampa.
Tengo muy buenos amigos en Madrid, y claro que hay muchas más oportunidades laborales, pero no es eso lo que necesitaba el Ivo post-ruptura.
Lo que necesitaba era vivir en un sitio donde pudiese bajar a tomarse un café con una ex-novia5, cenar con unos compañeros del colegio y acabar de cervezas con su mejor amigo sin gastar más de 15€6
Comer el domingo con mi madre, bajar a ver a mis abuelos el finde; estar al lado del río, a 30 minutos de la playa y a 20 de la montaña.
Ah, y los alquileres a 500€7
Todo eso y mucho más es lo que me ofrecía el sitio donde crecí: Murcia. Así que no tuve que pensármelo demasiado. En una semana encontré un piso fantástico en mi barrio favorito, del que te hablé en el capítulo 6, y desde ahí te escribo.
¿Un Ivo en Murcia, entonces?
Nada más pisar la calle me llegan los olores de los restaurantes y las pastelerías.
Siempre hay gente, pero no demasiada.
Tardo dos minutos en bajar a por un baklava y un té y cinco en llegar a los bares.
Hay luz todo el rato, todos los días.
Y así, volviendo a encontrarme con la región que tanto me ha dado, me di cuenta de lo bueno que sería seguir con mi blog en otro lado, con otro nombre: Un Ivo en Murcia8.
Mismo propósito, mismo formato y (casi) mismo casting.
Epílogo
Desde que el tonto de la tele empezó a meterse con Murcia, por lo único que se habla de ella es para burlarse del acento o de que no hay agua.
Yo creo que la ciudad (¡y la región!) merecen mucho más.
Y si te quedas por aquí, igual te lo cuento.
Quizá la razón que te trajo a este blog se esfume ahora como se esfumó mi vida en Andalucía.
Quizá simplemente quieras dejar de leerme.
En cualquiera de esos casos: muchas gracias y hasta siempre.
No obstante, te invitaré a mudarte conmigo al nuevo blog.
Quizá te sorprendas. Quizá te aburras más adelante.
Quizá Murcia sea uno de nuestros secretos mejor guardados.
Qué sabré yo.
Lo único que prometo es pasar por allí de vez en cuando y enseñarte sitios chulos pa’ comer, para cuando te apetezca visitar.
Hasta entonces, nos vemos en Internet.
A cuidarse, que refresca 💕
En Euskadi llaman «euskaldun berri» a quienes han aprendido euskera de mayores y «euskaldun zahar» a los que lo tienen como lengua materna. «Zahar» significa viejo, «berri» nuevo, y «euskaldun» ya te lo imaginas.
Porque quién en su sano juicio se iría al auténtico Silicon Valley.
(Dios es Paco de la Torre)
Madrid está muy bien si tienes mazo pasta.
(Una de las cosas que en Madrid está prohibido hacer)
(Resumen de mi primer fin de semana)
Que no hay tantos, ojo: abrieron cafeterías de especialidad y se jodió todo.
El branding es lo mio, lo sé.
Mudado al nuevo lugar, y enviándote un abrazo enorme que nunca está de más 🫂
Ya me he mudado a Ivo en Murcía para seguir tus aventuras
Me gustaba más Málaga, que soy de allí, aunque vivo en Madrid, pero me gusta mucho como cuentas tus aventuras.
Nos vemos por Ivi en Murcia 😊😊